Entre los días 06 y 16 de abril, el Padre Stefano Camerlengo estuvo visitando las comunidades IMC de México: San Antonio Juanacaxtle, en la periferia de Guadalajara y Tuxtla Gutiérrez, la capital del Estado de Chiapas. Le ha acompañado, el Padre Paolo Fedrigoni, Superior Delegado de Canadá-México-Estados Unidos.
Por Ramón Lázaro Esnaola *
La paleta de colores del cielo mexicano, el volumen de sus nubes y su espectacularidad fueron genialmente fotografiadas por Gabriel Figueroa en películas como Flor Silvestre o María Candelaria. A menudo, me quedo extasiado contemplando esa belleza que me conduce a Dios y me devuelve a la tierra, esta tierra mexicana rica en contrastes, en el volumen de sus negocios (15ª potencia mundial, justito detrás de España) y en la espectacularidad de su biodiversidad (cuarto del mundo, tras Brasil, Colombia e Indonesia).
Llegué a esta hermosa tierra hace apenas dos años, los dos años de la sindemia, de la pandemia sanitaria, económica y ecológica. En el ecuador del gobierno de AMLO (Andrés Manuel López Obrador), que llegó con las aspiraciones de la 4ª Transformación (las otras tres fueron: la Independencia (1824), la Reforma (1857) y la Revolución (1917) y que a este ritmo se va a diluir en unas cuantas reformas por no haber aprendido a dialogar. Lástima, otra oportunidad perdida para estas maravillosas gentes.
Llegué con una idea muy parcial de la realidad. Sólo se hablaba de balaceras, inseguridad, narcotráfico, cárteles, crimen organizado, feminicidios y efectos colaterales. Todo eso es cierto pero es una parte de la realidad. Descubrí familias muy acogedoras, un México festivo, alegre y amiguero. Alguien me dio una definición: México es un eterno domingo. También un México lleno de religiosidad popular, donde el rosario gana por goleada a la eucaristía; la Guadalupana a cualquiera que se le ponga delante; y los santos son parejos a Nuestro Señor.
En estos días, el Padre Stefano, nuestro Padre General, ha estado de visita en nuestras dos comunidades, que se encuentran a 1.500 km de distancia: San Antonio Juanacaxtle (en la periferia de Guadalajara, la 3ª ciudad del país) y Tuxtla Gutiérrez (la capital del Estado de Chiapas). Le ha acompañado, el Padre Paolo Fedrigoni, nuestro Superior Delegado de Canadá-México-Estados Unidos.
Ha sido un tiempo de gracia, de comunión con el Instituto y de discernimiento comunitario para buscar cuáles son las opciones ad gentes que tenemos que hacer como Instituto en este momento histórico.
La visita comenzó el martes, cinco de abril. Esa misma tarde celebramos en el salón de nuestra casa una eucaristía de aniversario luctuoso de una persona significativa de San Antonio Juanacaxtle y que fue muy cercana a los Misioneros de la Consolata cuando llegaron a este rancho en 2008. Fue una ocasión para ver la inserción de los misioneros en este lugar donde no tenemos ninguna responsabilidad pastoral formal. Sin embargo, dedicamos mucho tiempo al acompañamiento de personas, familias y mayores.
Diálogos con los misioneros
Al día siguiente, comenzamos los diálogos personales para ver el momento personal que estamos viviendo cada uno de nosotros. Fueron momentos de sinceridad y de tomar el pulso a nuestras emociones, nuestra espiritualidad, nuestra vida de fraternidad, nuestro servicio misionero y nuestro compromiso con la historia.
Ese mismo día, por la tarde, Padre Stefano participó a la junta que tuvimos los padres Mungai y Ramón con las catequistas del fraccionamiento Villas Andalucía. El arzobispo de la diócesis ha confiado a los misioneros de la Consolata la cura pastoral de este fraccionamiento y el de El Faro. El primero tiene unas ocho mil casas, es decir, más de 32.000 habitantes; y el segundo, unas mil casas. Son fraccionamientos que tienen menos de nueve años de creación, poblados por familias que vienen de todas partes del Estado de Jalisco y de otros Estados mexicanos como Michoacán, Nayarit, Guanajuato, Oaxaca y Veracruz.
Son familias humildes y trabajadoras donde la droga y el alcohol están muy presentes y donde los maltratos o los abusos intrafamiliares están a la orden del día. De hecho, acá llevamos a la práctica la metodología misionera que nos caracteriza de la visita a las familias y de acompañamiento de estas periferias existenciales. Estos dos fraccionamientos sufrieron especialmente las consecuencias de la sindemia y se empobrecieron mucho por la precariedad laboral que impuso esta situación.
Al día siguiente, tuvimos un encuentro comunitario con los padres Paolo y Stefano para ver la situación de nuestra comunidad de San Antonio Juanacaxtle. Fuimos invitados a una mayor reflexión comunitaria poniendo especial acento en las propuestas del Instituto para el Bienio de la Persona, a un mayor empuje en la Animación Misionera de la arquidiócesis y a la Animación Vocacional porque Jalisco es el Estado que tiene más vocaciones sacerdotales de todo el país; y a una profundización sobre la identidad de nuestra casa apostólica de formación.
El jueves por la tarde, los padres Stefano y Paolo tuvieron una junta con Padre Félix Shitaka, formador del Filosófico, y Alberto y Neptalí, dos jóvenes en formación de base que están estudiando Filosofía. El primero está en el segundo año y Neptalí en primer año. Fue también una ocasión para conocer de primera mano las nuevas generaciones mexicanas de Misioneros de la Consolata.
Ese mismo día, por la noche, fuimos a cenar a casa de Ginette y Wilmer, Laicos Misioneros de la Consolata (LMC) venezolanos que comenzaron nuestra presencia en México junto con los consagrados en 2009 y que actualmente colaboran en la Animación Misionera y Vocacional con nosotros.
Al día siguiente celebramos el cumpleaños de Padre Patrick Mungai, visitamos al Cardenal y solicitamos el Permiso de Estancia Definitiva de los Misioneros de la Consolata en su arquidiócesis. Fue una plática amigable, durante la cual agradecimos la acogida de la iglesia mexicana y él, por su parte, reconoció el camino recorrido durante estos trece años.
Encuentro online
El sábado por la mañana, tuvimos un encuentro en línea con la comunidad de Tuxtla y al que también participaron el Padre Luis Jimenez desde España y el Padre Jaime Patias desde Roma. Durante este encuentro fue presentado el documento de discernimiento del Grupo México para una tercera apertura en el país respondiendo al clamor que nos hacen en este contexto los pueblos indígenas y las personas migrantes. Fue un intercambio en el Espíritu, en ambiente de fraternidad, sin aferrarse a opciones preconcebidas sino en un clima fraterno y de búsqueda de la voluntad de Dios según nuestro carisma y según la idea originaria que tuvo el Instituto cuando llegó a estas tierras: la Animación Misionera y Vocacional.
Y, por la tarde, tuvimos la eucaristía del Domingo de Ramos en nuestro salón seguida de un encuentro con ambos para conocer mejor a la Consolata y amarla más. Fue un sencillo encuentro con las familias más allegadas a nuestra casa y que nos conocen desde que llegamos a México. Padre Stefano platicó sobre la realidad de los Misioneros de la Consolata en otros contextos culturales donde hay pocas personas que conocen a Jesucristo y ofreció una oportunidad para entablar contacto con familias que quieren mucho a la Consolata.
Tuxtla Gutiérrez
Al día siguiente, los padres Stefano y Paolo fueron a Tuxtla Gutiérrez a visitar a la comunidad y regresaron le Viernes Santo por la noche. AL día siguiente, antes de partir para continuar la visita canónica en Estados Unidos, tuvieron la ocasión de conocer a los niños y adolescentes que participaron en el retiro-convivencia del Sábado Santo. Era una convocatoria nueva que encontró muy buena acogida y en la que participaron 40 niños y niñas, en su mayor parte de San Antonio Juanacaxtle.
El paso del Padre General y Padre Paolo ha sido un momento significativo para ver la realidad actual de nuestra comunidad tras haber sufrido varios cambios últimamente. Pedimos al Dios de la Consolación que siga guiando nuestros pasos en este contexto de periferias existenciales y libres y disponibles para la Animación Misionera y Vocacional desde la cercanía con los pueblos indígenas y las personas inmigrantes.
* Padre Ramón Lázaro Esnaola, IMC, misionero español en San Antonio Juanacaxtle, México.
