Como peregrino de esperanza, el obispo Osório Citora Afonso, misionero de la Consolata, hasta entonces obispo auxiliar de la Arquidiócesis de Maputo, partió de la capital de Mozambique, recorriendo más de 1500 kilómetros hacia el norte del país. Su destino era la ciudad de Quelimane, en la provincia de Zambézia, con una nueva misión: comenzar su ministerio episcopal como pastor de esa iglesia local.
Por Jaimes Patias *
Al llegar a la primera comunidad de su nueva diócesis, el obispo besó el suelo en señal de respeto y gratitud. Una vez en Quelimane, Monseñor Osório Citora hizo un llamado a la solidaridad espiritual de quienes se reunieron para recibirlo en la Catedral de Nuestra Señora de la Liberación, el jueves 28 de agosto de 2025. El obispo enfatizó en la necesidad de una pastoral compartida, que describió como una “peregrinación conjunta”, señalando que “esta debe ser una experiencia compartida por todos como una Iglesia en salida”.
Esta peregrinación continúa. Es una peregrinación de todos, para que podamos caminar juntos. Nuestra tarea es caminar juntos, estar juntos como hermanos y hermanas; una peregrinación que no termina aquí, donde fuimos acogidos, sino que continuará —dijo—. Que el Señor nos conceda la gracia de caminar siempre juntos, iluminados por la Palabra de Dios. Les agradezco de corazón todo, la cálida bienvenida. Les pido que recen por mí, por esta misión mía, por esta misión nuestra —añadió.
Dom Osório Citora fue nombrado obispo ordinario de la diócesis de Quelimane por el Papa León XIV el 25 de julio y es el cuarto obispo desde su creación en 1954. La diócesis estaba vacante desde agosto de 2023, tras el traslado de Dom Hilário da Cruz Massinga a la diócesis de Inhambane.
El inicio del ministerio episcopal en Quelimane
La toma de posesión del obispo Osório Citora como obispo de Quelimane tuvo lugar el domingo 31 de agosto de 2025. La celebración eucarística fue inaugurada por el arzobispo de Beira, obispo Cláudio Dalla Zuana. Tras la ceremonia de investidura, el obispo Osório presidió la Santa Misa.
Los obispos de las diócesis de Tete, Lichinga, Gurué, Maputo y la diócesis de Manzini en Esuatini concelebraron, junto con numerosos sacerdotes. Varias religiosas y una gran multitud de fieles, así como miembros del gobierno local y nacional, participaron en la Eucaristía.
“En este momento, cuando me llaman para pronunciar la primera homilía al pueblo de Dios en Quelimane, recuerdo un acontecimiento sin precedentes en la historia del Santo Pueblo de Dios, narrado por el evangelista Lucas (Lucas 4,14-30), cuando Jesús, al entrar en la sinagoga de Nazaret, pronunció el discurso inaugural que marcó el inicio de su ministerio público” —dijo el obispo Osório Citora en su primera homilía como Pastor de Quelimane—.
A continuación, destacó dos elementos de este pasaje evangélico: «El primero es que Jesús es guiado por el Espíritu Santo. Desde ese momento, Jesús siempre es guiado por el Espíritu. ‘El Espíritu del Señor está sobre mí; por eso me ungió y me envió’. El segundo elemento —continuó el obispo— enfatiza que Jesús es inspirado e iluminado por la Palabra de Dios. Al inicio de nuestro ministerio pastoral, queremos enfatizar la centralidad de la Palabra de Dios en toda la actividad de nuestra Iglesia diocesana», recordó.
Al comentar el Evangelio del 22.º Domingo del Tiempo Ordinario (Lucas 14,1.7-14), el obispo Osório Citora explicó que «el banquete del Reino de Dios tiene una disposición de mesa muy diferente a la de las cenas oficiales terrenales. Son los últimos, los pobres, los que menos cuentan en la jerarquía social, quienes reciben un trato preferencial. Jesús se dirige al anfitrión y le sugiere que modifique la lista de invitados, incluyendo a los pobres, los mansos, los cojos y los ciegos», afirmó.
El obispo concluyó su homilía recordando que «el Señor nos reta a elegir gestos, incluso pequeños, marcados por una relación libre y altruista con las personas y las cosas. Debemos aprender a ser humildes en el servicio social, en nuestro trabajo y en las responsabilidades que asumimos en la Iglesia y más allá. Es esta lógica del servicio humilde la que también debemos transmitir a los hijos e hijas de Dios».
La Diócesis de Quelimane fue fundada en 1954 y tiene como patrona a Nuestra Señora de la Liberación. Su territorio abarca 57.798 kilómetros cuadrados y actualmente cuenta con 29 parroquias y misiones, aproximadamente 1.930 comunidades cristianas y 1.366.593 católicos, según estadísticas de 2025.
Breve biografía
Osório Citora Afonso, IMC, nacido el 6 de mayo de 1972 en Ribaue (Nampula), fue ordenado sacerdote en noviembre de 2002, tras completar sus estudios teológicos en el Seminario Teológico Santo Eugenio Mazenod de la Arquidiócesis Católica de Kinshasa, República Democrática del Congo (RDC).
Como sacerdote, ocupó diversos cargos, entre ellos vicario parroquial y administrador de la parroquia de Santo Hilario en la Arquidiócesis de Kinshasa, formador y ecónomo del Seminario Teológico de Kinshasa y colaborador local en la Nunciatura Apostólica en la República Democrática del Congo, entre otros. Obtuvo la Licenciatura en Sagrada Escritura en el Pontificio Instituto Bíblico de Roma y fue funcionario del Dicasterio para la Evangelización, en la Sección para la Primera Evangelización y las Nuevas Iglesias Particulares.
En septiembre de 2023, fue nombrado obispo auxiliar de Maputo. Fue consagrado obispo en enero de 2024. Es Secretario General de la Conferencia Episcopal de Mozambique (CEM).
* Padre Jaime C. Patias, IMC, Oficina de Comunicaciones. Con información del Padre Cassiano Kalima.
