La palabra “travesía” se erige como un concepto trascendental en las ricas culturas afrodescendientes que florecen en la diáspora. Atravesar connota la acción de dejar un territorio en busca de otro.
Juventud Pastoral Afro
De manera similar, en la tradición cristiana, la “travesía” representa un componente esencial. La mística cristiana nos habla de ese proceso en el cual uno debe abandonar su antigua vida para embarcarse en una nueva jornada.
La caravana afro caleña
Con este espíritu en mente, en 2016, el padre Venanzio Mwangi Munyiri, IMC, delegado de la Pastoral Afro de la Arquidiócesis de Cali, convocó un equipo de agentes de la Pastoral, para preparar la primera Gran Travesía Juvenil Afro. Invitó a los y las jóvenes de los semilleros del proceso pastoral, quienes aceptaron. Se encontraron en el Centro de Pastoral y Espiritualidad Afrocolombiana de Cali, para emprender una travesía monumental: conectarse con las raíces culturales de los pueblos negros del Pacífico colombiano.
A pesar de haber llegado a Colombia como esclavizados, la historia de estos pueblos no se limita a la esclavitud. Nuestras raíces se encuentran en África, en una tierra de reyes y reinas. Los símbolos, cantos y oraciones ayudaron a los jóvenes a reconectarse con sus raíces, como lo canta ChocQuibTown, “De donde vengo yo, la cosa no es fácil, pero siempre igual sobrevivimos“.
El semillero germina y se multiplica
Los jóvenes llevaron esta valiosa herencia cultural a otros rincones de la ciudad. Se dirigieron a San Antonio, un importante epicentro cultural en Cali, con canción, poesía y la danza.
A los siete años de la primera Gran Travesía, volvimos a vivirla. Esta vez, con el liderazgo del padre Elías Dominick Libanda, nuevo delegado arquidiocesano para la Pastoral Afro. Él delegó al equipo de jóvenes líderes, quienes habían vivido la experiencia, organizaron la nueva edición (2023) con diferentes jóvenes, provenientes de diversas comunidades, en continuidad con la primera (2016).
Encuentro en y con el río
Uno de los momentos más conmovedores de esta Gran Travesía fue la visita al río Pance. Elegimos el río en lugar de San Antonio, ya que muchos de los jóvenes provienen de la ciudad y carecen de conocimientos sobre la relación ancestral con la naturaleza, característica de las comunidades negras.
Allí rezamos junto al río y le agradecimos por todo lo que ha proporcionado a nuestro pueblo a lo largo de la historia. También descubrimos el significado que tiene el agua en nuestras vidas. Eblin Grueso, originario de Santa María de Timbiquí, compartió su sabiduría, revelando cómo el agua en el Pacífico se considera una medicina y una vía para conectarse con lo sagrado.
La Caravana continúa
Estamos agradecidos por esta Gran Travesía, pues muestra que la antorcha se está pasando a las nuevas generaciones. La pastoral afro de Cali ha forjado un camino y continúa haciéndolo junto a los jóvenes. Aquellos que se formaron hace unos años regresan ahora como líderes, con la experiencia necesaria para guiar el camino. La evangelización ha dado frutos, y seguimos avanzando. Seguimos el principio fundamental de las culturas negras, no solo en Colombia sino en toda América Latina: transmitir el conocimiento de generación en generación.
Juventud Pastoral Afro arquidiócesis de Cali.
